Casa de Granada

Curioso. Llevo años viviendo en Madrid y ni sabía que existía. Pasamos a tomar algo con unos amigos después de comer y la verdad que se está genial. Merece la pena subir a contemplar la plaza de Tirso desde otra perspectiva.

El sitio es espectacular, tiene una vistas impresionante como podéis apreciar en la foto. La atención es estupenda, son super majos y la comida está de pecado Además el restaurante está super limpio, organizado, hay calefactores en la terraza para poder estar muy confortable. Era la primera vez que iba que me llevó una amiga y desde luego cuando vaya por Madrid repetiré porque me ha encantado. Gracias por la atención ...

Hacía años que no iba. Pude ver la final del mundial con amigos. Precios algo altos, pero sitio agradable. Comida muy buena. Recomendable para ir a conocerlo. Volveré.

Increíble el sitio. Vistas maravillosas, hemos pedido calamares,chipirones, cazón y patatas mixtas. Todo súper rápido, todo súper rico. Viendo desde la mesa todo Madrid. Antencion fantástica de los dueños. Para volver sin duda Enhorabuena al dueño y a los empleados tan agradables y respetuosos y grandes profesionales. Fui con mi hermano que se dedica al sector en cocina y yo en sala. Hemos estado como en nuestra casa. Mil gracias

Pues curioso cuanto menos! Te hacen un carnet de socio al entrar y luego subes a la última planta donde tienes una vistas estupendas, además de un tapeo muy rico y atención muy adecuada. Totalmente recomendable para unas cervezas y tapeo si estás por la zona.

Tras un paseo cultural Madrid no puede faltar un buen lugar para comer. En esta ocasión elegimos la casa de Granada y fue un acierto. Buen servicio y todos sus planos son generosos y muy ricos. Muy recomendable si estás por la zona de Tirso de Molina.

Rufiano máximo. Las mesas han de estar cuadradas a 90°C, sino mejor abstenerse. Lo mejor: las vistas. Lo peor: el camarero es demasiado estupendo en situaciones cotidianas. Ojo con mover las mesas!!!

Bonita terraza con vistas a la plaza Tirso de Molina, muy agradable tomarse un vino y degustar alguno de sus platos, personal correcto y amable.