Jenkins - Cortes Valencianas

La comida estaba buena , un poco caro las quesadillas,no me parece un precio ajustado ni normal. Pero le doy la peor calificación y no volveremos porque la camarera que nos dio la carta ,que resulta ser un panfleto grande , que está bien , salvo el mío, que tenía una rueda de moto o coche marcada, y llena de suciedad,me quede blanco, avise a la camarera y sin ningún mero gesto ,me quito la carta y me trajo otra, pero tan tranquila sin disculpas ni nada, como si fuera normal que te dieran la carta después de haberla pisado un coche o moto, no quiero ni pensar la dejadez y guarreria de quien decidió coger esa carta del suelo pisada para volverla a dar a un cliente, y eso que comimos dentro ????

He comido muy bien la hamburguesa fue realmente buena, un poco costoso pero quedas bastante lleno. Le colocó tres estrellas porque la ubicación de la mesa en la que me senté estaba muy pegada a la salida del ascensor la cual por casualidad salió una persona cuando estábamos allí y le resultó un poco incómodo salir. Tengo que destacar también que el extintor que está Justo al lado del ascensor está a punto de caerse lo cual me parece que es un gran peligro. De resto muy buena atención.

La comida de 10. De las mejores hamburguesas que se pueden comer en Valencia. Las croquetas de rabo de toro y los nachos son imprescindibles si vas allí. Y la tarta de queso de otro mundo. Y la atención y el servicio muy buenos, se nota que hay un buen equipo y una buena dirección y gestión interna. 100% recomendado!

La comida deliciosa y perfecta. Recomendadas las hamburguesas. El problema surge en el servicio. A pesar de tener reserva de hace una semana, nos colocaron en una mesa que claramente no estaba reservada y estaba en una posición pegada a la barra. Tras pedir un cambio de sitio por el frío, no nos pudieron cambiar de mesa. Esta mesa al estar pegada a la barra causaba que estuviese en constante circulación los camareros al rededor de la mesa y aunque la primera vez que se chocó un camarero se disculpó, el resto de los camareros en las otras seis ocasiones que me dieron en el codo mientras comía o en el brazo, ignoraron el acontecimiento. Eso junto con un trato borde de todos los camareros menos el coordinador de sala. A parte de esto, la comida estaba muy rica!

Hamburguesas muy ricas, con una carta con muchas opciones para elegir. Además el lugar es bonito, aunque algo ruidoso cuando se llena. Se necesita reserva normalmente. Cómo crítica, retiran los platos de la mesa casi antes de acabar (con el último bocado en la boca).

Buen sitio para comer o cenar , buena atención por parte de los camareros, teníamos reserva de 2 mesas de 8 adultos y una de 10 niños y todo perfecto. Los nachos espectaculares y las hamburguesas muy buenas también. Sitio agradable

Comida y postres increíbles, a un precio asequible para su alta calidad. Trato muy cordial por parte de todos sus empleados, especialmente de Carla. Pocos lugares se pueden encontrar con personas tan amables, profesionales y serviciales como ella, ojalá la cuiden y valoren tan bien como se merece. Repetiremos por su eficiencia y por su alegría, sin duda.

Todo buenísimo. No nos costó mucho aparcar porque en la zona de detrás suele haber mucho sitio. La decoración del lugar está muy bien, acorde a la temática. Los camareros son simpáticos pero llegan a ser agobiantes porque en todo momento están pendientes de que te acabes una botella para quitártela, se pasarían como 30 veces por la mesa para quitarnos una botella en cada viaje y eso impide un poco la conversación dinámica con tus acompañantes pero por lo demás todo guay. El sabor de estas hamburguesas es maravilloso.