Punto y aparte Restaurante

Fuimos de comida esta Navidad. Al principio, hubo un malentendido con el tema de menú cerrado o pedir por libre. Se aclaró todo correctamente, pero la persona que nos trató no fue la más amable del mundo en un principio. Después, sí que es cierto, que mejoró su forma de comunicar y estuvimos súper a gusto. Estaba rico todo lo que probamos. Los principales algo escasos. Precio un poco elevado. No está mal.

Fuimos por el cumpleaños de una amiga, éramos 8 personas, también pedimos postre, café, jarras de cerveza y vino, croquetas y algún que otro plato fuera de las fotos, salimos a 38 euros por persona, la calidad fue estupenda y el personal también era muy amable. Para una fecha especial lo recomiendo 100%

Fui hace un año y me encantó, los platos muy llenos de comida y la atención increíble. Pero ahora ya no es lo mismo, platos con la mitad de comida que antes y al mismo precio y la atención, un poco pésima. Pedimos un refresco insistentemente porque no lo traían y luego trajeron varios y esto paso dos veces, después revisamos el ticket y si, los habían cobrado todos. Los camareros, unos muy atentos y respetuosos y otros… nada. Las patatas punto y aparte pone que son con trufa y cuando las pedimos, no llevaban. Adjunto foto del punto rockero y las patatas punto y aparte para que veáis lo que han cambiado y que las patatas, efectivamente no tienen trufa , y el pulpo no es ni parecido. En las fotos no se aprecia mucho la diferencia de cantidad de comida de los platos por la perspectiva, pero es notable. Aun así, es comida esta muy buena

Sitio perfecto para comer o cenar. Trato del personal inmejorable, siempre hacen que te sientas como en casa. Los platos son de primera y sin gastar una exageración. Esta en el corazón de Murcia capital con un parking público a poquísimos metros. Lo recomiendo totalmente.

Comida espectacular y trato inmejorable, pasamos una noche maravillosa sin ningún tipo de problema. Comida perfectamente adaptada para celiacos. Especial mención a Bruno y el resto de los camareros, muy atentos y profesionales con su trabajo. Mi más sincera enhorabuena, sin duda volveremos.

El camarero muy amable y atento. La comida pedimos marinera, patatas bravas, pulpo, entrecot y de postre coulantde chocolate. Recomiendo el pulpo roquero, estaba muy bueno.

La comida ha salido bastante rápida y la calidad de 10. El trato de los camareros ha sido lo suficientemente cercano como para nos sintiéramos cómodos en todo momento. Tanto las croquetas de gambas y marisco como los caballazos y tarta de abuelo, son motivos más que suficientes como para querer volver.

Lo mejor, la ubicación. El resto, para olvidar. Platos mediocres, jamón salado, pulpo mal cocinado. . Servicio lento. No una persona exigente, pero si le comentamos al camarero, en varias ocasiones que el jamón estaba muy salado, lo mínimo es ofrecer la posibilidad de cambiarlo y éste señor, nos ignoró completamente. Por cierto, a la hora de servir la botella de vino, el camarero hizo la cata y se bebió la copa. Ésto no lo he visto jamás en ningún restaurante del mundo. Sigo?